martes, 22 de mayo de 2012


LA EMANCIPACIÓN Y LOS INICIOS DE LA REPÚBLICA



1. CONTEXTO HISTÓRICO: La independencia americana fue la culminación de un largo y complejo proceso iniciado en el siglo XVIII y alimentado por distintos factores. En el campo de las ideas, la independencia de los USA (1977) y la revolución francesa (1789) levantaron las banderas de libertad y la igualdad pronto, estas ideas comenzaron a extenderse por todo nuestro continente americano.

En el campo de los hechos, la lucha por la independencia americana empieza con importantes insurreciones en casi todos nuestros países. En el Perú: Juan Santos Atahualpa (1742) y Túpac Amaru II (1780) organizaron una serie de conspiraciones y levantamientos en todo el país 

Poco a poco, la voluntad independencia se fue concretando . Tras largas y cruentas guerras, en los primeros 25 años del siglo XIX casi todos los países habíamos conquistado nuestra emancipación del dominio español.



sábado, 5 de mayo de 2012

LITERATURA DEL VIRREINATO O LA COLONIA

1. Contexto histórico: 


Comprende el año 1542 hasta 1780 se le conoce también con el nombre “Literatura Hispánica o Hispanófila” se inicia con la instauración del Primer Virreinato en el Perú (20/11/1942). 

A partir del siglo XVI, la corona española inicia una política de colonialización, tratando de construir en América una Nueva España, un régimen político económico y manejado desde la península, que asegurara la administración de las riquezas extraídas en las nuevas tierras conquistadas.

En el Perú se sustituyó la antigua economía agraria, base del incanato, por una economía minera. Desapareció también la organización social incaica; con el tiempo, de ella sólo quedó el ayllu, la célula comunal que pervive hasta la actualidad.

La unidad cultural de los virreinatos españoles establecidos en América estaba asegurada por el uso de una misma lengua: El castellano. Otro factor importantísimo de cohesión fueron las instituciones religiosas. Éstas después de la etapa inicial de evangelización , ejercieron gran influencia cultural a través de universidades.

Como consecuencia de la dominación española, en el siglo XVI se inicia una larga etapa de dependencia cultural que durará varios siglos y se romperá mucho después de lograda la independencia política americana.

Sin embargo, aun cuando los movimientos o escuelas llegaron a Europa - Y casi siempre con muchos años de retraso- Los artistas americanos elaboraron una obra muy importante- Reflejo de un espíritu distinto y singular, que expresó una gran calidad artística, y que sigue vigente hasta el día de hoy.

La colonia significó un largo proceso de nuestra historia: Duro casi 300 años, el doble de lo que lleva el Perú como República independiente. En esta larga etapa se sucedieron 3 movimientos artísticos: El Renacimiento, el Barroco y el Neoclásico.

Sin embargo, el estilo más representativo de la época colonial es el Barroco.Este estilo en contraposición al renacentista, afirma la exaltación, la vitalidad; presenta formas dinámicas complicadas; se complace en expresar los contrastes entre lo serio y lo trivial (insignificante), lo bello y lo grotesco, lo ideal y lo real.

Al mezclarse con la cultura y el arte de las poblaciones indígenas, el barroco americano presentó distintas manifestaciones  en cada lugar: Por ejemplo, la arquitectura colonial mexicana es distinta a la peruana o a la que se dio en las antillas. Lo mismo sucedió con la literatura y las artes plásticas. En el Perú,  la convivencia cultural de los español y lo indígena dio como feliz resultado la existencia de la Escuela Cusqueña.

Esta escuela pictórica, apreciadísima en el mundo entero, se inicia a fines del siglo XVI con la llegada del maestro italiano Bernardo Bitti. Bajo su influjo se abrieron numerosos talleres de arte donde trabajaban indios  y mestizos que realizaban obras por encargo para las órdenes religiosas.

Por lo general, los pintores de la Escuela Cusqueña eran anónimos. Sin embargo conservaron los nombres de algunos grandes maestros: Como Diego Quispe Tito y Basilio Pacheco. Una característica que identifica a la Escuela Cusqueña es el uso del dorado para decorar los cuadros; santos y ángeles con vestidos que parecen bordados de oro nos hacen recordar que, para el indio, el precioso metal era una ofrenda a los dioses.

2. Características:

- Los autores hispanoamericanos de la colonia tuvieron como  modelo los movimientos literarios que imperaban en Europa y, particularmente en España.

- Surgieron escritores criollos, quienes revelaron la originalidad y la capacidad creadora de la nueva sociedad mestiza.

3. Periodos de la literatura virreinal:

La literatura del virreinato o colonial, puede ser dividida cronológicamente en 3 periodos:

3.1. El Periodo Renacentista:


Los escritores hispanoamericanos tradujeron y estudiaron a los poetas clásicos y del renacimiento italiano. Principalmente escribieron epopeyas que recreaban la conquista de América y poesía religiosa.

Característica:

- Admiración a la antigüedad grecolatina: El espíritu renacentista marcó el curso de la literatura colonial durante el siglo XVI. 

3.2. El Periodo Bárroco:


Durante 190 años (1600 - 1750), el estilo barroco predominó en la literatura hispanoamericana. Esta corriente literaria se manifestó principalmente en el género lírico.

Característica: 

- Búsqueda constante de una mayor fuerza expresiva: Por eso, el lenguaje barroco es intencionalmente recargado, rico en metáforas, recursos estilísticos y constantes.

3.3. El periodo neoclásico:


El neoclasicismo nació en Francia en el siglo XVIII y se expandió rápidamente por el resto de Europa y por los países americanos.


Característica: 

- Retorno a la armonía clásica: Reaccionó contra las exageraciones del lenguaje barroco.

4. REPRESENTANTES: 

4.1. Diego de Ojeda: 


Nacido en Sevilla, en el año 1571 llegó al Perú antes de cumplir los quince años. Se ordenó sacerdote y ocupó altos puestos eclesiásticos. Estuvo estrechamente vinculado con los intelectuales de su época y cumplió con ellos la influencia renacentista. Su obra más importante: "La Cristiada". Falleció en el año 1615

"La Cristiada" es un extenso poema religioso que a lo largo de doce cantos, relata la pasión de Cristo desde la última cena hasta la crucifixión.


4.2. Amarilis:


Es una de las poetisas de mayor valía de la época de la colonia. Constituyó el principal enigma literario en los comienzos de nuestra literatura a fines del siglo XVII, la identidad de Amarilis se mantuvo en misterio y  a su alrededor se tejieron muchas hispótesis y conjeturas: ¿Fue una amante de Lope? ¿Fue una invención del propio Lope de Vega? 

Muchos investigadores y escritores han formulado una serie de hipótesis sobre la famosa autora de la “Epístola de Amarilis a Belardo”.

Muchos nombres se han vinculado a este seudónimo, (Amarilis) como Ana Morillo, María de Rojas y Garay, María de Figueroa, María Tello de Lara, María de Alvarado, lo cierto es que el poema, constituye una hermosa expresión lírica de la literatura colonial.

MARÍA ROJAS GARAY (AMARILIS)

Nacida en Huánuco en 1594, fue una escritora casi anónima que escudada con el seudónimo de "Amarilis", que es la hermosa mezcla de amar y María, escribió la Epístola a Belardo, dedicada a Lope de Vega "El Fénix de los Ingenios", en la que expresa su rendido amor y su completa admiración. Recién en 1993, las investigaciones del historiador Guillermo Lohmann  Villena han revelado el misterio de su nombre. 

EPÍSTOLA A BELARDO: Dirigida al dramaturgo español Lope de Vega, y publicada por éste, en su  libro: "La Filomena" (1621), el poema le había llegado desde el lejano Virreinato del Perú.

RESUMEN:

El poema es la descripción del amor de la poetisa por Lope de Vega, o amor por su hermosa poesía. Amor que se alcanza más allá del sentimiento material y la sujeción de todo al sentimiento religioso.
Los términos "dulce", "cielo", "amoroso", los verbos "amar", "dar", le dan al poema, sensualidad, ternura, y, sin embargo, es un amor "inmaterial" por un amado "ideal" con quien se unirá en el cielo.

CARACTERÍSTICAS:

Amarilis supo escribir un poema que consta de:
- 335 versos, de estilo fluido, armonioso, delicado, en versos de 7 y 11 sílabas.
- La estrofa predominante es la silva (son 19 estrofas)
- El verso empleado es heptasílabo y el endecasílabo
- El poema fundamentalmente es autobiográfico
- En la Epístola se alternan elementos de la mitología pagana con otros de origen cristiano.


POEMA EPÍSTOLA A BELARDO
( AMARILIS)

 


Tanto como la vista, la noticia
de grandes cosas suele las más veces
al alma tiernamente aficionarla,
que no hace el amor siempre justicia,
ni los ojos a veces son jueces
del valor de la cosa para amarla:
mas suele en los oídos retratarla
con tal virtud y adorno,

haciendo en los sentidos un soborno
(aunque distinto tengan el sujeto,
que en todo y en sus partes es perfecto),

que los inflama a todos
y busca luego aficiosos modos,
con el que pueda entenderse
el corazón, que piensa entretenerse,
con dulce imaginar para alentarse
sin mirar que no puede
amor sin esperanza sustentarse.

El sustentarse amor sin esperanza,
es fineza tan rara, que quisiera
saber su en algún pecho se ha hallado,
que las más veces la desconfianza
amortigua la llama que pudiera
obligar con amar lo deseado;
mas nunca tuve por dichoso estado

amar bienes posibles,
sino aquellos que son más imposibles.
A éstos ha de amar un alma osada;
pues para más alteza fue criada
que la que el mundo enseña;
y así quiero hacer una reseña
de amor dificultoso,
que sin pensar desvela mi reposo,

amando a quien no veo y me lastima:
ved qué extraños contrarios,
venidos de otro mundo y de otro clima.
Al fin de éste, donde el Sur me esconde
oí, Belardo, tus conceptos bellos,

tu dulzura y estilo milagroso;
vi con cuánto favor te corresponde
el que vio de su Dafne los cabellos
trocados de su daño en lauro umbroso
y admirando tu ingenio portentoso,

no puedo reportarme
del descubrirme a ti, y a mí dañarme.
Mas ¿qué daño podría nadie hacerme
que tu valer no pueda defenderme?

Y tendré gran disculpa,
si el amarte sin verte, fuera culpa,
que el mismo que lo hace,
probó primero el lazo en que me enlace,
durando para siempre las memorias
de los sucesos tristes,
que en su verguenza cuentan las historias.

Esto mi voluntad te da y ofrece
y ojalá yo pudiera con mis obras
hacerte prendas de mayor estima:
mas dionde tanto se merece,
de nadie no recibes, sino cobras
lo que te debe el mundo en prosa y rima.

He querido, pues viéndote en la cima
del alcázar de Apolo,
como su propio dueño, único y solo,
pedirte un don, que te agradezca el cielo,
para bien de tu alma y mi consuelo.

No te alborotes, tente,
que te aseguro bien que te contente,
cuando vieres mi intento,
y sé que lo harás con gran contento,
que al liberal no importa para asirle,
significar pobrezas,
pues con que más se agrada es con pedirle.

Yo y mi hermana, una santa celebramos,
cuya vida de nadie ha sido escrita,
como empresa que muchos han tenido:
el verla de tu mano deseamos;
tu dulce Musa alienta y resucita,
y ponla con estilo tan subido
que sea dondequiera conocido
y agradecido sea
de nuestra santa virgen Dorotea.

¡Oh, qué sujeto, mi Belardo, tienes
con que de lauro coronar tus sienes,
podrás, si no emperezas,
contando de esta virgen las grandezas,
que reconoce el cielo,
y respeta y adora todo el suelo:
de esta divina y admirable Santa
su santidad refiere,
y dulcemente su martirio canta!

Ya veo que tendrás por cosa nueva
no que te ofrezca censo un mundo nuevo,
que a ti cien mil que hubiera te le dijeran;
mas que mi Musa rústica se atreva
a emprender el asunto a que me atrevo,
hazaña que cien Tassos no emprendiera,
ellos, al fin, son hombre y temieran;
mas la mujer, que es fuerte,
no teme alguna vez la misma muerte.

Pero si he parecídote atrevida,
a lo menos parézcate rendida,
con fines desiguales
Amor los hace con su fuerza iguales:
y quédote debiendo
no que me sufras, mas que estés oyendo
con singular paciencia mis simplezas,
ocupado continuo
en tantas excelencias y grandezas.

Versos cansados, ¿qué furor os
lleva a ser sujetos de simpleza indiana
y a poneros en brazos de Belardo?
Al fin, aunque amarguéis, por fruta nueva,
os vendrán vuestro gusto bronco y tardo;
el ingenio gallardo,
en cuya mesa habéis de ser honrados,
hará vuiestros intentos deisculpados:
navegad, buen viaje, haced la vela
guiad un alma, que sin alas vuela.

4.3. Jorge de Espinoza Medrano:



Nació en el pueblecito de Calcanso, provincia de aymaraes en 1629 del Cusco.  Destacado aedo, dramaturgo y clérigo, considerásele el más alto defensor en el Perú de la Escuela Culterana.

Conocido con el seudónimo de Lunarejo, lo llamaban así por el lunar o lunares que marcaban su rostro, y en vida fue ya toda una leyenda
fue un fraile indígena. Recibió una educación privilegiada gracias al apoyo de un cura protector.

Estudia en el seminario San Antonio de Abad, destacando por su dedicación a los estudios. A temprana edad, ya lo tenemos vistiendo los hábitos franciscano, con los que también sobresale por su elocuencia y la calidad de sus sermones es decir fascinó a sus contemporáneos por la profundidad de sus conocimientos y sus grandes dotes de orador.

Se cuenta que, eran tan profundos y solemnes, que se arremolinaban en torno al púlpito, autoridades, intelectuales, aristócratas y, en general, toda suerte de los feligreses. A su término, no era raro ver enjugarse las lágrimas a mujeres… sino también a hombres.

ANÉCDOTA: En el ejercicio de esa carrera sacerdotal, tuvo infinidad de anécdotas todas ellas rezumantes de humanismo, ejemplo y valentía.

Una de ellas, se refiere a que un domingo, como de costumbre la feligresía colmaba la iglesia para escuchar a tan erudito sacerdote: de repente, empezó a agitarse y a impedir el paso de una india entrada en años y que esforzadamente pugnaba por abrirse camino a efecto de acercarse al pulpito, para escuchar mejor.

Juan Espinosa y Medrano, viendo esto, interrumpió súbitamente su sermón y con voz clara y fuerte exclamo: “Señores, den lugar a esa pobre india, que es mi madre”. Algún tiempo después, dejó de existir en la ciudad del Cusco en 1688.

OBRAS:

 NARRATIVA:
- La Novena Maravilla: Colección de sermones religiosos.

LÍRICAS:
- Apologético a Favor de don Luís de Góngora: Éste fue Príncipe de los Poetas líricos de España, escrito en favor del poeta español y de notable escrito bárroco.

TEATRALES:
- El Hijo Pródigo.
- El Amar su propia Muerte.
- El Rapto de Proserpina.

RESUMEN DE LA OBRA EL HIJO PRÓDIGO:

-

El hijo prodigo es un drama de carácter religioso que se enraíza con el teatro quechua. Como su nombre lo sugiere, su nombre es una versión de la parábola bíblica, pero con fuertes elementos indígenas. El hijo menor e Kuyaj Yaya, Hurin Saya, joven convertido al cristianismo, inicia un viaje con la finalidad de conocer el mundo, enriquecer sus conocimientos y deleitarse con todo lo bueno que puede encontrar en la vida.

En su travesía lo acompañan Diospa Simin (la Palabra de Dios), que permanentemente lo aconsejará para que no se desvíe del buen camino, y Uku (el cuerpo), que es un bufón.

Los tres se encuentran primero con Huayna Kari, símbolo de la juventud, y luego con Mundo, que es sinónimo de diversión, de placeres. Mundo le presenta a su hermana Aicha, que representa a la voluptuosidad, y Hurin Saya se enamora perdidamente de ella, e inicia una vida licenciosa que lo destroza física y moralmente. Harapiento y desfigurado, busca a sus amigos de diversión, pero todos lo echan porque ya no tiene dinero para gastar en fiestas.

En su desesperación, el joven cristiano se hace sirviente del diablo, entristecido por sus penurias, al final de la obra, la palabra de Dios lo rescata del infierno, y Hurin Saya regresa a su hogar, donde su padre lo recibe jubiloso, ante la protesta del hermano mayor, Hanan Saya, que no había salido de su casa.

4.4. Juan del Valle Caviedes:


Juan del Valle y Caviedes (¿1654 – 1698?), animo la corriente satírica y criollita que tanta fortuna haría en la literatura peruana.

Su expresión sencilla y directa, así como la índole de sus temas, lo definen como un poeta popular: alejado del gongorismo, por ser ajeno a la erudición y los cultos artificios que tal escuela frecuentara; y definitivamente orientado hacia el conceptismo, en cuanto emplea a la razón como elemento básico de su estilo.

Nació en Villa de Porcuna (Andalucía); pero muy niño fue traído a estas tierras y, por ende, formo en el Perú formo su concepto del mundo.

 Su padre, dedicado a los azares y trasiegos del comercio, descuido educarlo; y llegaron años en los cuales se desbordo su inquietud, placeres y livianos amoríos consumieron quizá sus años mozos y fue necesario enviarlo a España para condicionar la moderación de su conducta.

Al cabo de tres años recibió, allí, la noticia de la muerte de su padre. Regreso, para hacerse cargo de los negocios familiares, y en las alturas de Huarochirí anduvo entonces aplicado a tentar fortuna en la minería. Contrajo matrimonio (1671), con su joven colegiala a quien profeso sincero afecto; pero nada altero sus desordenadas costumbres.

Arruinado al fin, y enfermo, obtuvo un tenducho o “cajón” en la Ribera de palacio. Enviudo, y parece que el sentimiento troco el ritmo de su vida pues, dominado por recóndita amargado, empezó a mirar como extrañas y lejanas las cosas del contorno.

Fue desde entonces un espectador situado fuera de la escena y por eso capaz de apreciar la farsa escondida tras de su apariencia, pero también fue el actor ignorada menté corrido por su laceria.

Para desahogarse compuso versos punzantes o temblorosos, tan sencillos y plenos como “frutos silvestres de árbol de inculta montaña “. Y oscurecida la mente durante sus últimos años, desapareció calladamente.
En romances, decimas y cuarteles, del Valle y Cabiedes escribió numerosas sátiras, que infructuosamente dispuso para la estampa, en un volumen cuyo título es por si solo una revelación de vivacidad y picardía, agudeza y originalidad: Diente del parnaso.

En gran parte está dedicado a combatir contra los medios, cuyas artes fueron ineficaces para aliviar al poeta de los dolores ocasionados por un mal indefinido; pero no faltan mordientes burlas dirigidas como las costumbres de su tiempo, contra los tipos sociales que los representaron, o contra las veleidades del amor.

OBRAS:
Obra mayor: 
Diente de Parnaso

Soneto:
• Al doctor Bermeja
• Catorce definiciones del amor
• Remedios para saber lo que quieres
• Definición de la muerte
• Un abogado narigón


DIENTE DEL PARNASO
DÉCIMAS DE JUAN DEL VALLE Y CAVIEDES

A UN POETA QUE DE HACER VERSOS LE DIERON CURSOS


Enfermo estás de tus obras,

puesto, Vicente, que miras
que adoleces por detrás
de unas malas seguidillas.
No son más limpias tus coplas
que el mal de tu rabadilla,
porque tus cursos son cacas,
tus coplas cacofonías...
Límpiate con la comedia
que hiciste el otro día,
que más parecía toro
según chiflaban y huían...
Lee tus obras y no harás
penosas las medicinas,
que aquél que una copla aguarda
sufrirá dos mil jeringas...
Tus obras y lo que obras
todo es una cosa misma,
pues son tus letras tan sucias
que me parecen letrinas.

LOS PRIVILEGIOS DEL POBRE

El pobre es tonto, si calla;
y si habla es un majadero;
si sabe, es un hablador;
y si afable, es embustero;
si es cortés, entrometido;
cuando no sufre, soberbio;
cobarde, cuando es humilde;
y loco, cuando es resuelto;
si valiente, es temerario;
presumido, si es discreto;
adulador, si obedece;
y si se excusa, grosero;
si pretende, es atrevido;
si merece, es sin aprecio;
su nobleza es nada vista,
y su gala, sin aseo;
si trabaja, es codicioso,
y por el contrario extremo
un perdido, si descansa…
¡Miren si son privilegios!

A MI MUERTE PRÓXIMA

Que no moriré de viejo,
que no llego a los cuarenta,
pronosticado me tiene
de físicos la caterva.
Que una entraña hecha gigote
al otro mundo me lleva,
y el día menos pensado
tronaré como arpa vieja.

Nada me dicen de nuevo;
sé que la muerte em espera,
y pronto; pero no piensen
que he de cambiar de bandera.
Odiando las melecinas
como viví, así perezca;
que siempre el buen artillero
al pie del cañón revienta.

Mátenme de sus palabras
pero no de sus recetas,
que así matarme es venganza
pero no muerte a derechas.
Para morirme a mi gusto
no recurriré a la ciencia
de matalotes idiotas
que por la ciudad pasean.

¿Yo a mi Diente del Parnaso
por miedo traición hiciera?
¡Cuál rieran del cronista
las edades venideras i
Jesucristo unió el ejemplo
a la doctrina, y quien piensa
predicando ser apóstol,
de sus obras no reniega.

¡Me moriré i buen provecho.
¡Me moriré i en hora buena;
pero sin médicos cuervos
juntos de mi cabecera.
Un amigo si está avis
rara mi fortuna encuentra y un franciscano que me hable
de las verdades eternas,
y venga lo que viniera,
que apercibido me encuentra
para reventar lo mismo
que cargada camareta.

A UN MÉDICO TUERTO

CON ANTEOJOS QUE DESENTERRARON DE EL CALLAO, SIENDO EL SOLO, PORQUE MATABA MAS QUE MUCHOS JUNTOS Y TENIA POR FLOR COMERLES LA COMIDA A LOS ENFERMOS DICIENDO QUE LOS ANIMABA A COMER

Tuerto dos veces, por vista
la una y la otra por ciencia,
pues en la endiablada tuya
nunca haces cosa a derechas.
No llames siempre ante-ojos
a los que traes, porque a medias
ante-tuerto has de llamarlos,
pues la mitad está a ciegas.
Si no tienes más que un ojo
ociosa está una vidriera;
parece remedio tuvo
por cosa que no aprovecha.
Sin embargo eres el rey
en la medical ceguera;
si todos a ciegas curan tú no,
que curas a tuertas.
Tu vista nadie la entiende,
pues ni se repara en ella
tú no miras sino apuntas,
tú no ves sino que asestas
¿Cómo si apuntando curas
 no atinas con las recetas,
pues das tan lejos del mal
que todas las curas yerras?
A los enfermos les comes
las comidas y aun las cenas
para hacerles este mal
y que se mueran de dieta.
Aýudales a beber
tus malditas purgas puercas,
y les darás media vida
y tu tendrás otra media.
De las ayudas eleves
parte también, que les echas,
y ejercitarás dos ojos
que en un tuerto es cosa nueva.
Que el comerles las viandas
no es curarle las dolencias,
sino curarte del hambre
canina que te atormenta.
Si con los enfermos curas
tus hambres y tus pobrezas
ellos los médicos son
tú el enfermo que remedian.
Media visita debián pagarte,
en Dios y en conciencia,
que quieren medio ve al enfermo
no debe llevarla entera.
Del Callao te han echado
con descrédito de albéitar,
por enjalma de Galeno,
por limillo de Avicena.
Hínchate, doctor, de paja,
que las albardas rellenas
no matan tanto, y tendrás
hecho tu plato con ellas.
Que eres albarda no hay duda,
y me remito a la prueba,
pues la medicina tuya
por ser de albarda está en jerga.


COLOQUIO QUE TUBO CON LA MUERTE UN MÉDICO ESTANDO/ ENFERMO DE RIESGO.         
  

DÉCIMAS           

El Mundo todo es testigo,                         
Muerte de mi corazón,               
que no has tenido razón                            
de tirarte así conmigo, 
repara que soy tu Amigo,                           
y que de tus tiros tuertos,                         
en mí tienes los aciertos.                           
Excúsame la partida,                    
que por cada mes de vida,                        
te daré treinta mil muertos       
Muerte, si los Labradores,                         
dexan siempre que sembrar,                   
cómo quieres agotar                    
la semilla de Doctores,                
frutos te damos y mayores,                      
pues con purgas y con untos                    
damos a tu hoz asuntos                              
para que llene las troxes,           
y por cada Doctor coxes                             
diez fanegas de Difuntos.          
No seas desconosida,                  
ni conmigo vses rigores                              
pues la muerte sin Doctores,                   
no es muerte que es media vida,                           
pobre osiosa destruída,                              
que darás en esta suerte                           
sin que en tu aljaba concierte                  
siendo en tan grande mansilla                 
una pobre Muertesilla                 
o muerte de Malamuerte.         
Muerte sin Médico es llano,                     
que será por lo que infiero,                      
mosquete sin mosquetero,                      
espada, o Lanza sin mano,                         
que muerte tendrán en vano,                 
porque aunque la muerte sea,                
tal que todo quanto vea,                           
se lo lleve por delante                 
que a nadie mata es constante,                              
si el Doctor no la menea.                            
Muerte injusta a mí también                    
me tiras por la tetilla,                   
mas ya se no es maravilla,                         
pagar mal el servir bien,                             
por Galeno juro a quien,            
venero, que si el rigor                  
no conviertes en amor,                              
sanándome derrepente,                           
y muero de este accidente,      
que no he de ser más Doctor.                  
Mira que estos afanes,               
si así a los Médicos tratas,                          
que han de andar después a gatas,                       
los curas y sacristanes                  
porque soles, ni desmanes
la suegra y suegro peor,                             
fruta, y Nieve sin licor,                 
vala, estocada, ni canto,                             
no matan al año tanto                 
como el Médico mejor.               
Porque fiera no me achaques                  
te juro por Dios Vendito                             
de matar cual Don Benito           
Vrbanilla y Melchor Basquez,   
que despachan más que chasques,       
de tanto qual la porfía,                
de Ojo de Plata que al día                          
primero el enfermo ha muerto,                             
que como este es Doctor tuerto,                           
trae echa la puntería.                   
Seré el uno y otro Vtrilla,                           
en desollar con mis Artes,                         
y por matar por tres partes,                      
seré qual otro Rivilla                     
que mata con taravilla  
de retórica parlata,                       
con la Doctoría mata,                   
y también con sirujano,                              
sanguinolento y tirano                
con que es tres ojos de plata.  
Seré el Doctor Corcobado,                        
que con emplastos y apodos,                  
virla él solo más que todos                        
porque este mata doblado,                      
y aunque siempre anda,
de las espaldas y pecho,                             
este Médico contrahecho,                        
en el criminoso trato,                   
si cura qual garabato,                   
a matar sale derecho.  
Seré Chrespin que receta          
a salga lo que saliere,                   
de la cura donde diere,                               
con respice de escopeta,           
no hay vida en que no se meta,                              
con bárbaros aforismos                              
en latín de solisismos                   
aqueste intruso Doctor,                             
siendo el Bárbaro mayor,           
de todos los Barbarismos.
Seré en pegar la pedrada,                         
Don Lorenzo el sin igual,                             
que da muerte natural
porque su Cura es aindiada,                     
su persona es reservada,           
de Potosí por la suerte                
de Médico mas se advierte,                     
que tan sólo es en el rigor,                        
Casique y Governador,               
de la Mita de la muerte.             
Seré don Pedro Chinchilla                          
Médico que cura a pie                 
y mata muy bien aunque,                          
no es la mula con la silla,                             
también son de esta quadrilla, 
mil navajas engreídas                  
que en su exercicio perdidas                    
hoy te dan muertos a parvas,                  
dejando de quitar barbas,                         
por andar quitando vidas                           
como son el Licenciado               
Carafa torpe extrangero             
don Juan de Austria ayer Barvero,         
y Miguel López de Prado,                          
Godoy con su ojo saltado,         
sin otros mil curanderos,                            
ignorantes majaderos                 
que matan con livertad                               
más Hombres en la Ciudad                        
que un obligado, carneros.        
Seré la gran doña Elvira,                             
médica por sucios modos,                         
de la cámara de todos,                
porque a todos cursos mira.                     
con traiciones se conspira                          
con su jeringa pujante,               
que es por las ancas matante                   
de suerte que virla más                              
ella sola por detrás,                      
que nosotros por delante.




CABALLEROS CHANFLONES

El que hacerse quisiera caballero,
póngaseme muy grave y muy severo
y aprenda muy despacio
lo que son etiquetas de palacio.

Si nombrare al virrey, diga, su esencia,
y no como la plebe, Su excelencia;
al título lo trate de Usiría,
y que le nombra así de cortesía
y a que no hablarle más ya se resuelve
porque no se la vuelve.

Entra aquí al elegar ejecutorias
el suponer hazañas y memorias
heroicas de ascendientes,
y el hacer a diez grandes sus parientes.

Si este tal caballero fuere pobre,
porque todo le sobre,
a una iglesia se vaya, y, por dos reales,
que a un cochero le dé para tamales,
por este corto logro que interesa,
le meterá en el coche o la calesa
donde abriendo del todo las cortinas,
por las calles remotas y vecinas,
cuantos fuere por ellas encontrando
los irá saludando
llamándole de vos al mal vestido
y al galán poderoso y engreído,
de tú, porque les oigan tutearse
y así piensan que llegan a igualarse.

Si el tal le preguntare dónde ha estado,
le dirá que ocupado:

Su esencia le ha tenido
en consulta, cansado y aburrido,
porque el gobierno todo lo ha fiado
de su corto discurso limitado,
y que nunca le deja, aunque
él se excusa
y murmure algo de él,
que así se usa.

4.5. ALONSO CARRIÓ DE LA VANDERA (CONCOLORCORVO




Alonso Carrión de la Vandera , también conocido como La Vandera . Concolorcorvo es el seudónimo de el indio Calixto Bustamante que aparece como autor del Lazarillo de Ciegos Caminantes. No se tienen precisiones de su arribo a las Indias (América) aunque es probable que estuviera en la Nueva España hacia el año 1735, viajando luego al Río de la Plata y al Perú donde combatió a las incursiones inglesas. En 1767 acompañó a los Jesuitascuando estos fueron expulsados de los dominios españoles, sin embargo en 1771 recibió el cargo de Visitador de Correos en el extenso tramo que media entre las ciudades de Lima y Buenos Aires. La principal obra de Concolorcorvo fue el libro titulado Lazarillo de ciegos caminantes (título completo: Lazarillo de ciegos y caminantes desde Buenos Aires hasta Lima). En dicha obra, el relator (en primera persona) es un viajero que narra en modo documental el prolongado y lento viaje en carreta, previa etapa en Montevideo, desde la ciudad de Buenos Aires hacia el Alto Perú pasando por Córdoba, Santiago del Estero, San Miguel de Tucumán, Salta, Jujuy, Tarija. La narración documental pierde su continuidad (o el texto prosiguiente está perdido) al entrar en el Alto Perú.

El texto resulta valioso dado que aporta información cultural, geográfica, histórica y económica de un extenso territorio —con el típico y ameno carácter de la literatura de viajes—, señalando observaciones que siempre resultan (por el estilo) novedosas, sobre aspectos relevantes del territorio recorrido en su época; por ejemplo señala la relativa pobreza arquitectónica de la ciudad de Buenos Aires, la opulencia alcanzada por ciertos sectores de la sociedad cordobesa, la función de milicianos de frontera que cumplían las tropas reunidas por el cabildo de Santiago del Estero, lo propició para la agricultura de la zona de San Miguel del Tucumán, la belleza de las mujeres de Salta las cuales, empero, solían padecer de coto (esto por el agua carente de yodo que bebían), o la presencia de gauderios en las zonas de Jujuy y Tarija, los cuales en opinión de Concolorcorvo eran «soeces» y demasiado liberales, hecho que hacían notar con mucha efusividad en sus canciones improvisadas (payadas) cantadas de igual a igual por hombres y mujeres.
Modernamente se ha considerado que el libro en cuestión, que se indica como editado en Gijón durante el año 1773 pero del cual se conoce primera edición impresa en Lima durante 1776 no fue obra de Alonso Carrió de la Vandera sino de su secretario aborigen peruano Calixto Bustamante, aunque la crítica considera que Bustamante era el lazarillo o guía de La Vandera. En todo caso corresponde tener en cuenta ciertas notas estilísticas (que ya se trasuntan en el título, que evoca el Lazarillo de Tormes) semejantes a la literatura picaresca.
Otra obra firmada por Concolorcorvo es la llamada Reforma del Perú (1783), texto con consideraciones políticas que señalan la escisión del Virreinato del Perú ante la pronta creación del Virreinato del Río de la Plata.

OBRA:

EL LAZARILLO DE LOS CIEGOS CAMINANTES: 

Se trata de una carta del propio Carrió a Pedro Rodríguez Campomanes, Fiscal del Consejo de Castilla, en que Carrió declara expresamente que es el autor del Lazarillo, explica por qué lo escribió y se defiende de las críticas y acusaciones que recibió su obra. Al hilo de se importante documento, se revisa el enigma del cuatro PP., clave del Lazarillo.